Nada mas terminar de instalar Ubuntu 11.04 nos va a pedir reiniciar el sistema. Sacamos el disco y pulsamos return para que reinicie.
Una ver reinicia y llega a la ventana lo selección de usuario (login) elegimos nuestro usuario y abajo nos saldrán opciones de configuración. Buscamos y seleccionamos la que pone “Gnome clásico”. De esta manera evitamos entrar con el engendro de Unity. Introducimos nuestra contraseña para entrar.
Si no lo cambiamos en el futuro entraremos siempre con Gnome clásico. Unity es una de las mayores atrocidades que se han cometido contra el escritorio Linux. Otra es forzar los botones de control de ventana a que se coloquen en la izquierda y la última el OSNotify.